Los envases retornables en soluciones logísticas están pensados para una logística sostenible e innovadora. Por eso cada vez más empresas de transporte están especializadas en su uso.
Una tendencia en logística
Los envases retornables de transporte o ERT son aquellos que una vez que se usan se devuelven a su origen para volver a ser usados y cerrar el círculo. Más allá del usar y tirar, ahora se tiende a volver a utilizar los envases y esto se ha llevado hasta al transporte y Supply Chain. Es una de las nuevas tendencias que ha venido para quedarse dentro del sector por su gran impacto medioambiental y la firme apuesta de este por mejorar en este aspecto.
Con un crecimiento del 7,18% en el período de 2018-2019 este tipo de embalaje aporta diferentes ventajas ante el tradicional embalaje de un solo uso. Con un menor coste ofrece una mayor seguridad en los productos que se transportan. Así como, una ventaja frente a la preocupación actual sobre el medio ambiente.
Este tipo de embalaje, se puede usar para transportar y almacenar diferentes productos en varios ciclos. Se lavan, apilan y reciclan, en vez de tirar una vez usados, y vuelven a la empresa de origen para volver a en el transporte. Si se mantienen correctamente, pueden tener muchos usos y ahorrar coste en la logística garantizando una mayor durabilidad.
Ahorran costes, respetan el medio ambiente, simplifican las tareas al ser más fáciles de embalar y proporcionan una mayor solidez. Pueden ser diferentes tipos de cajas y contenedores de plástico apilables. Los envases retornables han revolucionado el campo de la logística, transporte y almacenaje con soluciones que proporcionan máximas garantías ahorrando costes. Esto es altamente beneficioso, no solo para el sector de logístico.
El impacto negativo del embalaje de un solo uso empezó a ser latente hace años y actualmente esta alternativa está siendo un claro elemento diferenciador.